Datos personales

viernes, 25 de enero de 2019

Criar sin etiquetas

 

                          



La verdadera y válida crianza es aquella que nace en nuestro interior, todo lo demás es escuchable pero la respuesta está dentro de cada una.


Llevo tiempo queriendo escribir este texto, casi casi tanto como desde que soy madre.
Se oye mucho lo de no etiquetar a nada ni a nadie, pero parece que al llegar la crianza ¡toma! Todo son etiquetas! Que si bebé de carrito, que si madre que portea, que si baby led weaning, que si bebé de teta o de biberón,que si “hacemos colecho”, que si tribu….Buf!
La verdad es que el embarazo y la maternidad son una gran oportunidad tanto para crecer como para realizar una cura de humildad a lo grande!
Para crecer y para reencontrarnos con nuestra mamífera hibernante; para reaprender a escuchar la voz interior que despierta con más fuerza que nunca y se convierte en eco permanente; para dejar hacer a nuestra naturaleza, sin juicios y siendo sinceras con nosotras mismas.
Para mí esto es lo más importante! Hacer aquello que nazca dentro de cada una! Y sí, digo de cada una porque la maternidad, aún viviendola acompañada, es cosa de una; de una+un@, en todo caso, no de 2,ni de 20.
Las personas y grupos de apoyo son muy importantes, pero a veces están tan llenos de vivencias como de prejuicios porque al final se basan en unos principios con los que probablemente estés de acuerdo pero que puedes no mantener rígidos a lo largo de toda la crianza; la flexibilidad es también un derecho y una muy interesante enseñanza.
Yo he dado teta, he dormido con mis hijas, las he llevado colgadas durante meses (a veces a las dos a la vez),les he dado cachitos de mi comida en sus primeros contactos ; no me he saltado las pautas del pediatra porque ni he ido a verle, se han subido a mesas antes de andar, se la “han jugado” en maniobras imposibles y saltos “al vacío” ante la horrorizada y atemorizada vista de medio Vigo.
También he destetado; he usado silla de paseo, les he dado un helado de merendar o pollo frito, he gritado, he llorado, he aguantado el bocadillo mientras ellas juegan, he deseado tener una niñera, he puesto la tele para respirar un poco y un sinfín de cosas que más de una vez he dicho “ yo jamás….” Ahí tenemos la cura de humildad!
Todo esto porque así lo he sentido y lo siento, porque así crío tranquila, así soy yo como madre. Nadie más lo haría igual a mí ni yo igual a nadie!Esa es parte de la magia! Todas tenemos algo especial que ofrecer, algo inigualable.
Claro que es muy importante informarse y buscar apoyo, si se necesita o si se desea, pero siempre permaneciendo en nuestro centro, escuchándonos a nosotras mismas ante todo, escuchando otras opiniones, pero sabiendo que la respuesta está en nuestro interior; en nuestras células ya vive la información necesaria para todo, solo tenemos que conectar con ella.
De nada sirve intentar marcar todas las casillas de lo que una crianza de apego supone, porque hacer aquello con lo que no resonamos, aparte de ser una falta de sinceridad con nosotras mismas ( y nuestr@s hij@s), nos hace perder la oportunidad de vivir según nuestro instinto y a la larga resulta inviable hacer algo que no sintamos desde dentro.
Está muy bien buscar soluciones cuando nos encontramos perdidas ( y en la maternidad hay muchas pérdidas temporales 😸) pero ahora más que nunca “la solución, la respuesta, la salida es hacia dentro” todo está dentro de ti.
Solo necesitas creerte!💜
14/05/18

No hay comentarios:

Publicar un comentario